Luego de agradecer al Papa Benedicto XVI su contribución de 100 000 dólares para ayudar a los damnificados por la tragedia en Japón, los obispos anunciaron que se reunirán este miércoles 16 de marzo para coordinar la respuesta de la Iglesia tras el terremoto y el tsunami.
El Obispo de Sendai, la zona más afectada por la catástrofe, Mons. Tetsuo Hiraga, señaló a la agencia vaticana Fides que los prelados de Japón se reunirán en su diócesis con carácter de emergencia.
"Tenemos que asesorarnos sobre cómo actuar. Mientras tanto, confiamos en Dios y pedimos las oraciones de todos los cristianos en todo el mundo", indicó.