El ministro católico Shahbaz Bhatti, asesinado el 2 de marzo por terroristas talibanes, era para los líderes cristianos y católicos el principal defensor de los cristianos en Pakistán, donde hasta el final abogó por cambiar la polémica Ley de Blasfemia, usada para hostigar a los no musulmanes.
Bhatti, que a mediados de febrero pasado fue confirmado como Ministro para las minorías religiosas y era el único cristiano en el Gobierno de Pakistán, fue asesinado a tiros mientras viajaba en su automóvil sin escolta rumbo a su oficina en Islamabad (Pakistán). Un grupo terrorista talibán se adjudicó la autoría del crimen.
La agencia vaticana Fides publicó una serie de testimonios de líderes cristianos y católicos sobre Bhatti llegados a su redacción solo unos días antes del asesinato.