Al reflexionar sobre los aportes del Papa León XIII y la Doctrina Social de la Iglesia, el Papa Benedicto XVI consideró que en la historia “los cristianos, actuando como ciudadanos individualmente, o de manera asociada, constituyen una fuerza beneficiosa y pacífica de cambio profundo”.
El Santo Padre llegó ayer a Carpineto Romano, a 80 kilómetros de Roma, con motivo del bicentenario del nacimiento -en esa localidad- de Vincenzo Gioacchino Pecci, el Papa León XIII.
El Papa celebró la Santa Misa en la plaza principal ante miles de fieles y en su homilía habló de la "promoción humana aportada por el cristianismo en el camino de la civilización" y explicó que los cristianos han favorecido “el desarrollo de las capacidades internas en la realidad misma. Es ésta la forma de presencia y de acción en el mundo propuesta por la doctrina social de la Iglesia, que apunta siempre a la madurez de las conciencias como condición de transformaciones válidas y duraderas".