El Papa Benedicto XVI recordó que toda persona, y especial los jóvenes, necesitan de raíces profundas y válidos fundamentos para construir una vida sólida y segura, y que tales raíces y fundamentos deben estar en Cristo.
Ante un gran número de fieles y peregrinos se dio cita este mediodía en la Plaza central de Castel Gandolfo para rezar el Ángelus dominical, el Santo Padre habló sobre su Mensaje para la XXVI Jornada Mundial de la Juventud que se celebrará en agosto del 2011 en Madrid.
“Enraizados y fundados en Cristo, firmes en la fe”, es el tema del encuentro más grande de jóvenes católicos con el Pontífice. “Es decididamente una propuesta contra la corriente. Quien, en efecto, propone hoy en día a los jóvenes estar enraizados y firmes. Más bien se exalta la incerteza, el cambio, la volubilidad … aspectos que reflejan una cultura indecisa frente a los valores de fondo, los principios de base a los cuales orientarse y regular la propia vida”, dijo el Papa.