El Promotor de Justicia (fiscal) de la Santa Sede, Mons. Charles Scicluna, en su intervención en la conferencia de prensa sobre las nuevas normas referentes a los delitos graves en la Iglesia entre los que se encuentran los abusos sexuales por parte de miembros del clero, indicó que si bien estas disposiciones son importantes, es necesario ponerlas en práctica de manera eficiente.
En el encuentro catalogado por algunos como algo "que no se veía desde los días del Cardenal Ratzinger", Mons. Scicluna respondió con amabilidad, precisión y de manera directa a las preguntas que los periodistas le hicieron en inglés e italiano. Uno de los primeros temas fue el de la ordenación de mujeres que un sector ha querido equiparar a los abusos sexuales contra menores: "No están en el mismo nivel", precisó, "ya que los pecados graves están divididos entre los que están contra la moralidad cristiana y los cometidos en la administración de los sacramentos".
Tras indicar que los abusos sexuales contra menores y la pornografía infantil son pecados más graves y representan "una seria violación a la ley natural", el promotor dijo que la ordenación de mujeres es grave "a otro nivel", precisando que esto genera una herida que va contra la fe católica y el sacramento del Orden sagrado.