La asociación católica Ayuda a la Iglesia que Sufre (AIS) lanzó una campaña en ayuda a la población de Haití que sufre el drama la desnutrición infantil y una pobreza extrema que afecta al 55% de la población.
Según señala la doctora Carmen Lagos, trabajadora voluntaria en Haití, en el país “no es obvio tener agua, no es obvio prender la luz y que se prenda, no se puede dar por hecho que la gente sabe leer y escribir, ya que solo la mitad de los niños van al colegio”.
“Trabajando como médico allá, me tocó vivir el sufrimiento de la gente por el aumento del precio de los alimentos debido a la crisis económica mundial. Al centro de salud donde yo trabajaba comenzaron a llegar cada vez más niños desnutridos”, agregó.