Al recibir este viernes a una delegación ecuménica de Finlandia con motivo de la festividad de San Enrique, patrono del país, el Papa Benedicto XV subrayó que la oración es el único camino que llevará a la unidad definitiva de los cristianos.
"La unidad de los cristianos es un don de lo alto, que brota de la comunión de amor con el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo y progresa hacia ella", dijo el Santo Padre; quien subrayó que "la oración conjunta de luteranos y católicos de Finlandia es un humilde, pero fiel compartir la oración de Jesús, que prometió que toda plegaria elevada al Padre en su nombre sería escuchada".
"Esta es realmente la puerta principal hacia el ecumenismo: esta oración nos lleva a considerar el Reino de Dios y la unidad de la Iglesia de un modo nuevo; refuerza nuestros vínculos de comunión; nos capacita para afrontar con valentía las recuerdos dolorosos, las cargas sociales y la debilidades humanas que constituyen una gran parte de nuestras divisiones", explicó el Papa.