Al tiempo de precisar que la jornada "Por la familia cristiana" celebrada en la capital española el pasado 30 de diciembre fue convocada por los movimientos laicales diocesanos, el Consejo de Laicos de Madrid pidió a los gobernantes españoles respetar el derecho a ejercer su fe en libertad así como a quienes manifiestan públicamente ideas distintas a las suyas.
A través de un comunicado dado a conocer este lunes, el Consejo expresa "su preocupación ante las reacciones y manifestaciones" de algunos políticos socialistas españoles con motivo del acto que reunió a casi dos millones de personas en defensa del matrimonio y la familia.
El ente laical, que reúne a los miembros de movimientos eclesiales, asociaciones y vicarías de la arquidiócesis, puntualiza que "los convocantes de esta celebración fuimos los movimientos seglares, integrados por personas que viven y trabajan en el mundo y que, aun siguiendo carismas y espiritualidades diferentes, se sienten Pueblo de Dios y ciudadanos".
