9 de enero de 2008 / 09:03 AM
Al retomar el tema de la relación entre Jesucristo y la Iglesia desde una perspectiva histórica, el Papa Benedicto XVI centró este miércoles su atención en la gran figura de San Agustín de Hipona, y concluyó el encuentro anunciando que dedicará las próximas audiencias generales a reflexionar en torno a la teología del gran Padre de la Iglesia.
"Luego de las fiestas de Navidad, quisiera regresar a las meditaciones sobre los Padres de la Iglesia y hablar hoy sobre el más grande de los Padres de la Iglesia latina, San Agustín", dijo el Pontífice.
"Hombre de pasión y de fe –dijo el Santo Padre–, de inteligencia altísima y de premura pastoral incansable, este gran santo y doctor de la Iglesia es frecuente conocido, al menos de nombre, incluso por quien ignora el cristianismo o no tiene familiaridad con él, porque ha dejado una huella muy profunda en la vida cultural de Occidente y de todo el mundo".