El Arzobispo de Manizales, Mons. Fabio Betancur Tirado, instó a los fieles de su jurisdicción a no asistir a celebraciones litúrgicas o Misas organizadas por sacerdotes que por algún motivo se encuentren suspendidos en su ministerio.
En un reciente comunicado dado a conocer por el diario La Patria.com, el Prelado precisa que lo mismo debe hacerse con los presbíteros "que personalmente hayan abandonado el ministerio", pues así "han abandonado de hecho su comunión con la Iglesia Católica, Apostólica y Romana, a la cual el Arzobispo sirve como legítimo sucesor de los Apóstoles, y se han apartado de su disciplina, y por lo tanto han desconocido las normas eclesiales".
El texto, leído en todas las parroquias de la Arquidiócesis de Manizales, se refiere a los sacerdotes suspendidos Bernardo Pino Ocampo y José Helio López Soto, quienes el pasado 6 de octubre se "incardinaron" en la cismática "iglesia guadalupana", cuyos "sacerdotes pueden estar casados y tener hijos", informa LaPatria.com