Al término de su Asamblea Plenaria, la Conferencia Episcopal Chilena (CECH) deploró "algunas políticas emanadas de la autoridad de salud" como obligar a todas las cadenas de farmacias a vender la píldora del día siguiente pues perjudican a la ciudadanía al "atentar en contra de la sexualidad humana y la familia".
En su declaración titulada "Mañana tras mañana el Señor despierta mi oído para escuchar como los discípulos", los prelados hicieron esta denuncia tras explicar que "en el último tiempo, pequeños y grandes acuerdos en distintos planos de la vida social nos han confirmado que el diálogo es el principal camino para la solución de conflictos y para fortalecer los liderazgos en la participación y corresponsabilidad social".
Tras expresar su esperanza en que "el Consejo Asesor Presidencial para la Equidad y el Trabajo llegue a proponer soluciones que vayan en beneficio de los más pobres", la CECH destacó que "no podemos celebrar el nacimiento del Señor de la Vida, sin manifestar la profunda tristeza que nos embarga al constatar una persistente actitud atentatoria contra la vida humana".