La Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB) emitió un comunicado en el que protestó enérgicamente por la decisión de Amnistía Internacional (AI) de promover y apoyar, a nivel mundial, el aborto como un “derecho humano” de las mujeres.
En un comunicado fechado el 23 de agosto y firmado por el Presidente de la USCCB, Mons. William S. Skylstad, los prelados explican que este “cambio de política daña seriamente la credibilidad moral de Amnistía y desvía innecesariamente su misión. Al promover el aborto, Amnistía divide a sus propios miembros (muchos de los cuales son católicos y otros que defienden los derechos de los no nacidos) y pone en peligro el apoyo de la gente en muchas naciones, culturas y religiones que comparten el compromiso con todos los derechos humanos”.
Para los obispos de Estados Unidos, estas acciones de AI, “llevarán a mucha gente consciente a buscar medios alternativos para ponerle fin a los abusos cometidos sobre los derechos humanos, luchar contra la injusticia, y promover la libertad de conciencia y expresión”.