El Arzobispo de México, Cardenal Norberto Rivera Carrera, llamó a los feligreses a imitar a San Juan Diego, “modelo de laico que todos debemos seguir” convertido en símbolo de unidad de dos pueblos que parecían irreconciliables entre sí “con culturas distintas y religiones diversas”.
“Juan Diego es símbolo de esa unidad. Allí descubrimos los misterios del Reino, ese misterio de Dios que es Uno en la gran diversidad; y no puede concebirse mayor diversidad que la que se daba en ese momento: entre un pueblo oprimido y un pueblo vencedor”, afirmó el Purpurado en la Misa celebrada en la Basílica de Guadalupe, conmemorando el 5º aniversario de la canonización del vidente de Guadalupe.
Asimismo, el Cardenal señaló que el joven indígena mexicano representa a la Iglesia “que va naciendo en nuestro continente, esa Iglesia que se edifica no solamente con la palabra, sino en torno al obispo, porque donde no hay obispo no puede haber Iglesia”.