El P. Vicente Cárcel Ortí, experto en temas de la persecución religiosa durante la Guerra Civil en España, precisó que los 498 mártires que serán beatificados el próximo 28 de octubre murieron por su fe. "Se les mató simplemente por el símbolo, porque representaban a la Iglesia. Es más, si cualquiera de ellos se hubiera metido en política, la Iglesia nunca los proclamaría mártires", precisó.
Según relata el diario español La Razón, el también autor de los libros "La persecución religiosa en España durante la Segunda República" y "La gran persecución. España" indicó que "los mártires fueron hombres y mujeres que pertenecían a las clases más bajas de la sociedad, eran tan pobres como sus propios asesinos. No tenían nada que ver con la guerra, no empuñaron ningún arma, no se enfrentaron a nadie ni gritaron nunca ‘¡Viva Franco!’".
Asimismo, el sacerdote español explicó que "la mayor parte de los martirios se produjeron antes de que la Iglesia española se pronunciara a favor de un bando u otro. De hecho, el primer documento oficial de los obispos españoles que se posiciona al lado de los nacionales data del 1 de julio de 1937 y para entonces ya habían sido asesinados hasta seis mil 500 sacerdotes, religiosos y laicos".