El Cardenal Ivan Dias, Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, lanzó una campaña de oración que se extiende a todos los monasterios de clausura femeninos de Italia, pidiendo que la carta de Benedicto XVI a los católicos en China sea bien recibida y que puedan vivir la libertad religiosa.
Para el Purpurado, la misiva del Papa quiere "expresar su proximidad paternal y ofrecer algunas orientaciones relativas a la vida de la Iglesia y la obra de la evangelización" en China.
El Cardenal Dias recuerda que los católicos en China se dividen en la iglesia "oficial", reconocida por Pekín, y la clandestina fiel al Santo Padre, algo que considera "causa de mucho sufrimiento y confusión entre los pastores y fieles”.