Celebran 60 años de sacerdote, de Apóstol de la Vida y la Familia

El pasado 15 de junio, la comunidad pro-vida y pro-familia de Estados Unidos y el mundo celebró los 60 años de sacerdote del P. Paul Marx, O.S.B., fundador de Human Life International y Vida Humana Internacional.

El Padre Marx fue ordenado sacerdote para la Orden de los Benedictinos en 1947, luego de obtener su doctorado en Sociología en la Catholic University of America. De joven enseñó en la St. John's University en Collegeville, Minnesota.

Durante este ministerio, vino la gran encíclica del Papa Paulo VI, Humanae Vitae de 1968. El Padre Marx se dedicó completamente a trabajar en defensa de las enseñanzas de la Iglesia a favor de la vida; trabajo que hizo que el recordado Papa Juan Pablo II lo llamara "el Apóstol de la Vida"; mientras que la International Planned Parenthood Federation (IPPF) lo denominó su "enemigo público número 1".

Durante su largo y fecundo apostolado, el P. Marx fue pionero en el estudio y difusión de la regulación natural de la natalidad mediante los numerosos simposios y seminarios que organizó en Estados Unidos y en el resto del mundo.

Fue además uno de los primeros en poner al descubierto los planes de la industria del aborto: dos años antes de su legalización en Estados Unidos, escribió el libro, "The Death Peddlers: War on the Unborn" ("Los promotores de la muerte: La Guerra a los no nacidos").

Con la fundación de HLI-VHI, el Sacerdote benedictino visitó 91 países de todo el mundo promoviendo la Cultura de la Vida y denunciando la cultura de la muerte; y convirtió a estas instituciones en una de los principales promotores de congresos, material pro-vida y organizaciones locales para prevenir la legalización del aborto en el mundo.

Steven W. Mosher, actual Presidente del Population Research Institute, uno de los centros de investigación más influyentes en la lucha contra el control natal compulsivo, escribió recientemente una reseña del P. Marx reveladora y personal.

"Le debo mucho al Padre Marx. Él fue quien me enroló en el movimiento pro-vida, el movimiento social más importante del mundo en la actualidad. Fue él también quien me acercó a Cristo y me introdujo en la Fe católica, de modo que le debo la salud de mi alma. Fue él quien me enseñó el nexo que hay entre anticoncepción y aborto, y por ello le debo, en parte también a él, la bendición que significan mis hijos. Él fundó Population Research Institute en 1989 y luego en 1995 me pidió que me integre y lo dirija, de modo que también le debo el don que es mi apostolado. Y hoy, a los 87 años de edad, él continúa rezando todos los días por nuestro trabajo", afirma Mosher.