Con más de mil bautizos culminó la "Gran Misión" realizada en la provincia de Carabaya (Puno), durante tres semanas en el sur de los andes peruanos, y en la que participaron 140 misioneros alentados por el Obispo de Ayaviri, Mons. Kay Schmalhausen.
Durante la Misa de clausura, Mons. Schmalhausen agradeció a los misioneros por su entrega generosa e invitó a los pobladores a asumir cada uno "la posta evangelizadora, convirtiéndose en catequista y misionero en su propio barrio, poblado y comunidad, pues son aún muchos los que tienen el deseo de conocer a Cristo, pero no se han encontrado hasta ahora con quienes se lo anuncien oportunamente".
Los 140 misioneros, en su mayoría jóvenes pertenecientes a Lumen Dei, provenían de Lima, Arequipa, Cuzco, y Tacna. Durante casi todo febrero visitaron los poblados de Macusani, Corani, Ayapata e Ituata.