El Papa Benedicto XVI alentó a trabajar incansablemente por los enfermos, especialmente aquellos que padecen enfermedades incurables y los niños, durante el lanzamiento de un nuevo proyecto apoyado por la Santa Sede que producirá vacunas para contrarrestar enfermedades pandémicas en los países más pobres del orbe.
En presencia de los ministros de finanzas de Italia, Inglaterra, Canadá y Rusia, junto con la Reina de Jordania y el Presidente del Banco Mundial, entre otros, el Pontífice señaló que este programa mundial busca “ayudar a resolver uno de los más grandes desafíos en lo que a cuidados preventivos se refiere y que particularmente afecta a las naciones pobres y con muchas necesidades”.
Al recordar la próxima Jornada Mundial del Enfermo que se celebrará el 11 de febrero, el Papa precisó que ésta es ocasión para que la Iglesia busque “centrar la atención pública en las dificultades de quienes sufren, y en este año en aquellos que padecen de enfermedades incurables, muchos de los cuales están en su fase terminal”.