Ante el incremento de la tensión nacional producida por la confrontación entre el Congreso y el Presidente Rafael Correa, la Conferencia Episcopal Ecuatoriana lanzó un enérgico llamado a la reconciliación entre los poderes para evitar el incremento de la violencia en el país.
Miles de seguidores del partido del Presidente Correa “Alianza País”, que carece de representación en el Congreso, tomaron la sede del Poder legislativo para protestar por la oposición de la mayoría de congresistas al Referéndum que el nuevo Presidente quiere convocar para cambiar la Constitución del país.
En el comunicado, los obispos señalan que “los elegidos para servir a los ecuatorianos desde las diversas funciones del Estado son depositarios de la confianza ciudadana y deben comprobar con sus actos y actitudes que la han merecido y que la siguen mereciendo”.