Al celebrar esta tarde en la Basílica de San Pedro las primeras vísperas del primer Domingo de Adviento, primera celebración tras su viaje a Turquía, el Papa Benedicto XVI destacó que al inicio de un nuevo ciclo anual la liturgia invita a la Iglesia a anunciar a todos los pueblos que “Dios viene” para ofrecernos la felicidad y la salvación.
Reflexionando en la primera antífona de esta celebración, “Anunciad a los pueblos: Dios viene, nuestro Salvador”, el Santo Padre destacó que “la liturgia invita a la Iglesia a renovar su anuncio a todos los pueblos y lo resume en dos palabras: ‘Dios viene’”.
Al llamar la atención sobre el tiempo presente del verbo “venir” de la antífona, el Pontífice dijo que el Adviento nos recuerda que Dios viene, “¡no ayer, no mañana, sino Hoy, ahora! El único verdadero Dios, ‘el Dios de Abraham, de Isaac y Jacob’ no es un Dios que está en el cielo, desinteresado de nosotros y de nuestra historia, sino que es Dios que viene”.