El sacerdote y crítico literario José Miguel Ibáñez Langlois llamó a las autoridades chilenas a no equivocarse al enfrentar los embarazos precoces y cuestionó el anuncio del reparto masivo de la píldora del día siguiente entre los adolescentes sin el consentimiento de sus padres.
"La cantidad de embarazos juveniles es un problema tan tremendo, que no podemos darnos el lujo de equivocarnos en su resolución. Toda campaña que soslaye el factor clave de la educación -el protagonismo de los padres de familia- está destinada al fracaso, por muchas píldoras que se distribuyan, o peor aun, por el hecho de distribuirlas", indicó el sacerdote desde su más reciente columna en el diario El Mercurio.
Asimismo, recordó que "las autoridades públicas deben velar por la salud de hijos y padres, pero no obstaculizar la ya difícil tarea de estos últimos con aquellas sospechosas asesorías íntimas y casi clandestinas a sus mocitas. Quien no ayuda a limpiar, que por lo menos ayude a no ensuciar los espacios del alma adolescente.