La filial en México de la trasnacional abortista IPAS arremetió contra el gobierno nacional exigiéndole hacer caso a las "recomendaciones" del polémico Comité para la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer de las Naciones Unidas (CEDAW), para liberalizar el aborto en el país.
El CEDAW es el organismo creado por la ONU para verificar la eliminación de toda forma de discriminación de la mujer. Su autoridad ha sido libremente ratificada por cada nación. Debido a la inclinación marcadamente abortista y feminista del organismo, numerosas organizaciones pro-vida han presionado para que sus respectivas naciones se abstengan de ratificar el protocolo, que daría al CEDAW ingerencia en la política interna.
Cada país que ha firmado y ratificado la Convención debe informar cada cuatro años acerca de sus avances para garantizar los derechos de las mujeres. Uno de estos derechos, para la CEDAW, sería el aborto legal.