Las autoridades de la Capital y Provincia de Buenos Aires liberalizarán la práctica del aborto utilizando el único caso legal contemplado en las leyes argentinas.
El Código Penal establece que un aborto es legal cuando "proviene de una violación cometida sobre una mujer idiota o demente". Los ministros de salud de ambas localidades se comprometieron a "reglamentar" estos contados casos en unas dos semanas. Es decir, que ya no será necesario solicitar una autorización judicial para su práctica.
De esta manera, los ministros respondieron al pedido de organizaciones feministas anti-vida que reclamaron una resolución que obligue a los médicos a practicar los abortos no punibles en cualquier centro de salud.