Las jornadas son auspiciadas por el Arzobispado de Buenos Aires y, sobre el mismo, el Cardenal Jorge Bergoglio ha destacado "la importancia de esta iniciativa que posibilitará a los hombres y mujeres de la cultura ser activos y participativos protagonistas del deber que les compete, en beneficio de la unidad social y particularmente del bien común".
El Congreso cuenta también con el apoyo del Presidente del Consejo Pontificio para la Cultura, Cardenal Paul Poupard, y según Cartasso, "se presenta como un espacio, entre muchos otros que hoy valiosamente existen, donde nos encontraremos para discernir, escuchar, dialogar y proponer. No sólo intentamos avizorar el futuro, sino también buscamos ayudar y ayudarnos fraternalmente para edificar una sociedad más justa, más plena, donde no haya excluidos".
Las jornadas estarán dirigidas a "católicos comprometidos en la vida pública que participan, entre otros espacios, en el mundo de la educación, de la investigación y de la creación artística; en los ámbitos religiosos y de reflexión humanista; en los medios empresarios y de comunicación social; y en los lugares donde se edifica la sociedad civil y el orden político".