"Colombia es un país crucial para la Iglesia iberoamericana y me atrevería a afirmar que lo es para el mundo entero", dijo Javier Legorreta, jefe de la Sección de Iberoamérica I de la organización internacional Ayuda a la Iglesia que Sufre (AIS).
Luego de visitar el país sudamericano, Legorreta señaló que "durante años se ha venido registrando un importante aumento de las vocaciones, con cientos de candidatos al sacerdocio y a la vida religiosa" en él, y destacó que "hay más de 100 monasterios contemplativos en las 50 diócesis colombianas", y "cientos de evangelizadores colombianos" trabajan fuera de Colombia.
Asimismo, explicó que "aproximadamente el 95 por ciento de la población, de más de 40 millones de habitantes, son católicos, y en Colombia las sectas no son tan fuertes como en otros países iberoamericanos".