Educar a los jóvenes en la fe católica es una tarea cada vez más difícil pero urgente, dijo el Papa Benedicto XVI el lunes por la tarde en la Basílica de San Juan de Letrán, al inaugurar el Congreso eclesial de Roma que se celebra del 5 al 8 de junio.
Dirigiéndose a los participantes del Congreso titulado: “La alegría de la fe y la educación de las nuevas generaciones”, el Pontífice señaló que “educar a las nuevas generaciones en la fe es una tarea grande y fundamental, a la que está llamada toda la comunidad cristiana”, y que por ser “especialmente difícil, es más urgente que nunca”.
“La certeza y la alegría de ser amados por Dios debe hacerse en cualquier modo palpable y concreta en cada uno de nosotros, y sobre todo en las jóvenes generaciones que están entrando en el mundo de la fe”, agregó.