La Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) pidió al Gobierno que la reciente nacionalización de los hidrocarburos beneficie a todos los bolivianos y no derive en “la corrupción y la mala administración que conocimos” en el pasado.
El Episcopado emitió un mensaje al final de su 82º Asamblea Plenaria, en el que señala que la medida “incide fuertemente en la vida y el futuro del país”. “Esta disposición quiere ser el cumplimiento de la voluntad de la población, expresada mayoritariamente en el Referéndum vinculante del mes de julio de 2004”, afirma.
En ese sentido, los obispos piden que la medida se implemente “en el marco de la equidad y justicia, evitando la corrupción y la mala administración que conocimos en las empresas estatales del pasado”; para beneficiar a todos los bolivianos, especialmente a “los más pobres y desprotegidos de la sociedad”.