20 de abril de 2006 / 11:37 AM
La Santa Sede hizo pública la carta en la que el Papa Benedicto XVI nombra al Arzobispo de Santo Domingo (República Dominicana), Cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, su enviado especial para las celebraciones en Lima del IV Centenario de la muerte de Santo Toribio de Mogrovejo, y en la que destaca el ardor apostólico del Patrono del Episcopado latinoamericano.
En la misiva dirigida al Purpurado, el Santo Padre recuerda que "la Iglesia Católica suele brindar un culto apropiado a todos los santos y sobre todo a aquellos que se han dedicado diligente y excelentemente a obras insignes, los cuales bien han sido merecidos de la Iglesia y han sido claros ejemplos de virtud y que, movidos por un ardoroso fervor interior, se han consagrado a Dios y a la salud de la Iglesia".
"Entre ellos ciertamente se debe contar sin lugar a dudas a Santo Toribio de Mogrovejo, segundo Arzobispo de Lima y Patrón celestial de todo el Episcopado de América Latina, quien, dotado de una óptima disciplina e inflamado por el ardor apostólico, se dedicó a que el anuncio del Evangelio sea ampliamente difundido entre los pueblos peruanos y se solidarizó con la Iglesia de esos lugares con diligencia", afirma el Pontífice en su carta escrita en latín y fechada el 4 de marzo pasado.