La International Planned Parenthood Federation (IPPF), dueña de la cadena de “clínicas” abortivas más grande del mundo, busca desde hace un tiempo el apoyo de líderes religiosos de distintas confesiones para expandir su imperio anti-vida.
Según informa el sitio pro-vida LifeNews.com, Planned Parenthood organizó un desayuno “de oración” en el hotel Hilton de esta ciudad el viernes pasado, al que convocó a distintas autoridades religiosas que apoyan el aborto.
"Estamos reunidos esta mañana porque, gracias a nuestro esfuerzo colectivo, somos agentes de redención en nuestro frágil mundo. Como clérigos de distintas denominaciones le decimos ‘sí’ al llamado que está frente a nosotros”, manifestó el rabino Dennis S. Ross, director del anti-vida Concerned Clergy for Choice.