El sitio pro-vida LifeSiteNews.com difundió un estudio en el que se demuestra que las mujeres que se han sometido a un aborto, con frecuencia terminan abusando del alcohol y las drogas para lidiar con las consecuencias del trauma que éste les produce.
Pricilla Coleman, autora del estudio y profesora de Desarrollo Humano y Estudios Familiares de la Bowling Green State University, indicó que el estudio demuestra que las mujeres que han abortado tienen cinco veces más probabilidades de consumir drogas y alcohol, que una mujer que no ha abortado.
Asimismo, el estudio muestra que las mujeres tienden más que los hombres a consumir drogas y alcohol cuando existe un trauma personal, o cuando hubo abuso sexual o existe alguna enfermedad o disfunción familiar en su entorno.