Al inaugurar hoy el año académico de la Universidad Católica del Sagrado Corazón en Roma, el Papa Benedicto XVI aseguró que una auténtica universidad católica se caracteriza por la síntesis entre la calidad de investigación y enseñanza y la fidelidad al Evangelio y al magisterio eclesial.
Tras destacar el gran número de jóvenes que estudian en este centro de estudios, el Santo Padre preguntó "¿Cómo salen de aquí? ¿Qué cultura han encontrado, asimilado, elaborado? Este es el gran desafío: Dar vida a una auténtica universidad católica, que se caracterice por la calidad de la investigación y de la enseñanza, y al mismo tiempo, por la fidelidad al Evangelio y al magisterio de la Iglesia".
En su discurso, el Pontífice dijo que “la universidad católica es un gran laboratorio en el que, según las diversas disciplinas, se elaboran nuevas vías de investigación en un encuentro entre fe y razón que tiene como objetivo recuperar la síntesis entre ambas, a menudo contestada por corrientes importantes de la filosofía moderna”.