Al tiempo de expresar su preocupación y condena por los actos de violencia en Tierra Santa, el Vaticano rechazó las palabras del presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, de “borrar a Israel del mapa” calificándolas de “graves e inaceptables” e hizo un llamado escuchar el clamor de los pueblos por la paz.
“La Santa Sede expresa su gran preocupación ante los graves hechos registrados en los últimos días en Tierra Santa y se suma a toda la comunidad internacional expresando su firme condena por los actos de violencia de cualquier parte provengan, como el ataque terrorista de Hedera y la sucesiva represalia”, afirmó el director de la Sala de Prensa vaticana, Joaquín Navarro-Valls en relación al atentado cometido el pasado miércoles por un suicida palestino en la ciudad israelí de Hedera, que costó la vida de cinco personas.
En la declaración escrita, leída este viernes por la tarde por el vocero vaticano, la Santa Sede condenó asimismo “algunas declaraciones, particularmente graves e inaceptables, con las que se niega el derecho a la existencia del Estado de Israel”, refiriéndose de manera implícita a las palabras de Ahmadineyad acerca de “borrar a Israel del mapa”.