Organizaciones solidarias expresaron su adhesión al manifiesto del Colectivo de Educadores Cristianos Autogestionarios que niega que el Estado y el mercado puedan limitar la libertad de los padres y de la Iglesia Católica en la educación de los menores, derecho que consideran amenazado por el proyecto de reforma educativa del Gobierno español.
Las organizaciones que se adhieren el manifiesto son el Movimiento Cultural Cristiano, el partido político Solidaridad y Autogestión Internacionalista (SAIn) y el Camino Juvenil Solidario.
Los educadores, que defienden un modelo de educación solidaria y la autogestión pedagógica, enfatizaron que el deber “esencial, original y primario, insustituible e inalienable de lo educación de los hijos” corresponde a los padres y negaron que “el Estado y el mercado puedan usurpar este deber y este derecho de las familias”.