Identificarse como pro-vida puede ser “suicidio profesional” en Perú

La nueva presidenta de la Coordinadora Nacional Unidos por la Vida (CNUV), Sandra Távara de Quiroz, explicó que en el Perú muchos médicos no se identifican como pro-vidas por temor a un “suicidio profesional”.

Como médico y presidenta electa de la CNUV, una coalición de grupos que defienden la vida en Perú, Távara declaró al sitio web Provida Perú que en el sector salud “por lo general es más fácil quedarse callado, no oponerse, alinearse con los grupos de poder económico, político, y no perder espacio o negocio”.

Según la líder pro-vida el tema de la defensa de la vida parece no interesar a muchos médicos que lo esquivan y dan cualquier pretexto para evitar apoyar la causa porque “hacer lo contrario es un suicidio profesional”.

Para Távara, la embestida contra la vida parte de “instituciones internacionales como la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de la Salud (OMS)” que trabajan glosarios “científicos” para engañar diciendo “que la vida no comienza cuando se unen las dos células de los progenitores (óvulo y espermatozoide), y también para señalar que el embarazo comienza recién cuando el óvulo fecundado se implanta en el útero; es decir, que si no se ha pegado en el útero, la mujer no está embarazada, ni existe en ella una nueva vida”.

“Evidentemente, se han esforzado por ocultar la verdad o mentir, que es lo mismo. Y así es cada vez mayor la mentira que avanza como una inmensa bola de nieve en contra de millones de vidas humanas inocentes”, indicó.

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