Muchas familias en Belén participan de un importante programa realizado por la organización católica Ayuda a la Iglesia que Sufre (AIS); que les proporcionó una fuente de trabajo con la fabricación de rosarios.
Esta iniciativa le ha permitido a muchas personas tener alimento y cobijo en Tierra Santa, mientras manufacturan rosarios de madera de olivo.
AIS inició la campaña luego de conocer que cientos de familias vivían en lugares sin electricidad porque sus negocios de artículos religiosos habían sufrido un considerable descenso debido a los conflictos existentes en la zona.