La organización de inspiración católica “Armonizar”, logró un acuerdo con la Neurosurgery Foundation, del Rhode Island Hospital (Estados Unidos), para que una niña con una malformación en el cerebro reciba un tratamiento que le salvará la vida.
La niña Fiorela Sangama Pizango, natural de Iquitos (en la Amazonía peruana), padece de una malformación arteriovenosa en el cerebro, cuya complejidad hace que no pueda ser operada en el Perú.
Según los médicos que la han atendido, el único tratamiento posible es el sofisticado “Gamma knife”, un método de operación que se realiza en los mejores hospitales de Estados Unidos.