Cáritas Chile ha activado un plan para socorrer a los damnificados por el terremoto del lunes pasado, que alcanzó los 7,9 grados en la escala de Richter causó 12 muertos y dejó miles de damnificados en el norte del país.
Para Cáritas lo más urgente “es la recolección de alimentos no perecibles y frazadas”. Fuentes del Obispado de Iquique indicaron que el Administrador Diocesano, Mons. Marcos Órdenes, se ha dirigido al pueblo de Tarapacá, lugar del epicentro, para “asistir a la gente más afectada”.
De acuerdo a Cáritas Chile, “los mayores daños se produjeron en los sectores rurales del interior de Iquique en la Primera Región, donde hay casas de adobe”.