Con motivo de la celebración de la fiesta de los mártires San Ciriaco y Santa Paula, Patronos de Málaga, el Obispo local, Mons. Antonio Dorado Soto, afirmó que si bien en la España actual “no se aplica a los católicos la tortura física”, sí se los somete a torturas psicológicas, “que no son menos dolorosas y graves”. Ante ello, alentó a los cristianos a no esconder su fe en Jesucristo por miedo.
En una carta, el Prelado reconoció que “es verdad que, en nuestro tiempo y en nuestra España actual, no se aplica a los católicos la tortura física, pero se los somete a torturas psicológicas, que no son menos dolorosas y graves. En los últimos meses hemos visto ejemplos repetidos y dolorosos”.
Después de denunciar los insultos gratuitos y las medias verdades difundidas en los medios de comunicación, el Obispo indicó que también “se hace burla en programas de televisión o en la vida cotidiana de signos tan sagrados y tan serios como la Última Cena, la Corona de Espinas y el sacramento de la penitencia”.