El día de hoy el Papa Benedicto XVI recibió a los participantes del peregrinaje de la diócesis de Verona y en sus palabras destacó la centralidad de la Eucaristía, así como la importancia de la familia en la sociedad.
Durante el discurso pronunciado en el aula Pablo VI, el Santo Padre resaltó la Eucaristía como “corazón de la Iglesia y de la vida cristiana” y citando al difunto Pontífice Juan Pablo II afirmó que “la Iglesia vive de la Eucaristía”.
“En la Eucaristía- continuó- Cristo está realmente presente entre nosotros. La suya no es una presencia estática. Es una presencia dinámica, que nos aferra a hacernos suyos, para asimilarnos a sí. Cristo nos jala hacia sí, nos hace salir de nosotros mismos para hacer de nosotros una sola cosa con Él”. Y destacando la importancia de la vida espiritual recordó que “depende esencialmente de la Eucaristía. Sin ella la fe y la esperanza se apagan, la caridad se enfría. Os exhorto a tener siempre mayor cuidado con la calidad de las celebraciones eucarísticas”.