Benedicto XVI instó a “la común y sincera” condena del nazismo y del comunismo, para que sirva al compromiso de todos los hombres en la construcción del perdón, la reconciliación y la paz, luego de la proyección en el Aula Pablo VI de la película para televisión "Karol, un hombre elegido Papa".
El Santo Padre afirmó que “nada podrá mejorar al mundo si el mal no es vencido y éste sólo puede ser superado con el perdón”. “El 8 de mayo de 1945 concluyó aquella descomunal tragedia que sembró en Europa y en el mundo, en medida jamás experimentada hasta entonces, destrucción y muerte. Cada vez que una ideología totalitaria pisotea al hombre, toda la humanidad está seriamente amenazada", añadió el Santo Padre.
El Pontífice también manifestó que con el paso de los años los recuerdos no deben palidecer, sino que deben llegar a ser una “severa lección para la nuestra y las futuras generaciones".