El Arzobispo de Sevilla, Cardenal Carlos Amigo Vallejo, calificó al Papa Benedicto XVI como “muy buena gente” y destacó su apertura al diálogo manifestando que la imagen “de persona que tiene que seguir los pasos de una ortodoxia rígida y no dialogante” desaparecerá en muy poco tiempo.
El Purpurado, que participó en el reciente Cónclave que eligió al sucesor de Juan Pablo II, declaró que el nuevo Papa es "muy buena gente", una expresión que, según dijo, "en Andalucía comprenden perfectamente".
Tras reconocer que "en muchos ambientes se tiene otra imagen del prefecto de la doctrina de la fe", el Cardenal aseguró que "ya verán como en muy poco tiempo esa imagen va a desaparecer".