Con el título “En nombre de Cristo, déjense reconciliar”, la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB), emitió una declaración oficial en la que exhorta a todos los bolivianos a dejar de lado las “posiciones polarizadas e irreconciliables”.
El documento empieza por hacer una evaluación de la situación actual del país altiplánico “todos somos testigos de posiciones y medidas radicales que provocan una situación de incertidumbre general. Los hechos recientes de presión social y la renuncia del Presidente de la República, reflejan el momento extremo al que estamos llegando los bolivianos. Esta situación de disgregación política y social, pone en riesgo la estabilidad democrática y la propia institucionalidad del país”.
Los Obispos advierten que “no podemos seguir en actitudes de enfrentamiento que nos están llevando al borde del abismo. Basta de posiciones polarizadas e irreconciliables. Ratificamos nuestra confianza en el sistema democrático como el mejor espacio de convivencia fraterna entre bolivianos” y agregan que “ha llegado la hora de retomar el diálogo y la capacidad de concertación; es necesario asumir la corresponsabilidad del grave momento que vivimos desde las organizaciones sociales, políticas, institucionales, nacionales y regionales, para defender lo que hasta hoy hemos logrado”.