El Papa León XIV presidió esta mañana una Misa en las Grutas Vaticanas, en el altar situado junto a la tumba del apóstol Pedro, antes de asomarse al balcón central de la Basílica de San Pedro para rezar el Regina Coeli.

Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram

Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:

Según informó la Oficina de Prensa del Vaticano, el Pontífice concelebró la Eucaristía con el Prior General de la Orden de San Agustín, el P. Alejandro Moral Antón, en esta zona subterránea situada bajo la Basílica de San Pedro en el Vaticano.

En su homilía, pronunciada una parte en inglés y la otra en italiano, el Papa recordó que este 11 de mayo se celebra el domingo del Buen Pastor. “Jesucristo, a quien seguimos, es el Buen Pastor, y es quien nos da la vida: el camino, la verdad y la vida. Por eso celebramos con alegría este día y agradecemos profundamente su presencia aquí”, expresó.

Asimismo, destacó que este segundo domingo de mayo también se celebra el Día de la Madre en varios países del mundo, y afirmó que “una de las expresiones más maravillosas del amor de Dios es el amor que derraman las madres, especialmente hacia sus hijos y nietos”.

Pero además, señaló que este día también es especial porque se celebra la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones. León XIV recordó que antes y después del cónclave se habló con los cardenales “sobre las vocaciones en la Iglesia y la importancia de que todos busquemos juntos”. 

“Ante todo —recordó—, dando buen ejemplo con nuestras vidas, con alegría, viviendo la alegría del Evangelio, sin desanimar a los demás, sino buscando maneras de animar a los jóvenes a escuchar la voz del Señor, a seguirla y a servir en la Iglesia. ‘Yo soy el Buen Pastor’, nos dice”.

Finalmente, el Santo Padre señaló que, como enseña el relato bíblico del viaje de Pablo y Bernabé a Antioquía, el Evangelio debe ser anunciado a todo el mundo. 

“¡Ánimo! ¡Sin miedo! Muchas veces Jesús dice en el Evangelio: ‘No tengáis miedo’. Debemos ser valientes en el testimonio que damos, con palabras y sobre todo con la vida: dando la vida, sirviendo, a veces con grandes sacrificios para vivir esta misma misión”, expresó.

León XIV indicó que primero se debe “escuchar siempre la Palabra de Dios. Luego también escuchar a los demás, saber tender puentes, saber escuchar para no juzgar, no cerrar puertas pensando que tenemos toda la verdad y que nadie más puede decirnos nada”. 

“Es muy importante escuchar la voz del Señor, escucharnos a nosotros mismos en este diálogo y ver adónde nos llama el Señor. Caminemos juntos en la Iglesia, pidamos al Señor que nos dé esta gracia de poder escuchar su Palabra para servir a todo su pueblo”, señaló.

Culminada la Misa, León XIV se detuvo unos minutos en oración ante las tumbas de sus predecesores. En la cripta vaticana fue enterrado el 5 de enero de 2023 Benedicto XVI, en una lápida de mármol con la inscripción en latín Benedictus PP. XVI, justo al lado de la tumba de la Reina Cristina de Suecia (1626-1689). 

El Papa alemán fue sepultado precisamente donde estuvo anteriormente la tumba de San Juan Pablo II. Los restos de Wojtyła fueron trasladados en el 2011, inmediatamente después de su beatificación, a la capilla de San Sebastián, junto a la Piedad de Miguel Ángel.

Según informó el Vaticano, León XIV también se detuvo a rezar frente a la llamada Nicchia dei Palli, donde se conservan los palios destinados a los arzobispos metropolitanos, símbolo de comunión con la Sede Apostólica.