Con ocasión del inicio del curso escolar, el Obispo de León, Mons. Julián López Martín, pidió a los protagonistas del ámbito educativo valorar más la enseñanza de Religión en las escuelas y enfrentar con coraje los problemas en un ambiente hostil a ella.
En una carta pastoral, Mons. López anunció que la prioridad más urgente y necesaria en el curso que ahora empieza es “valorar mucho más la enseñanza de la religión católica” en la escuela, “pese a las dificultades a las que hemos de hacer frente con coraje y decisión tanto en la escuela pública como en la de titularidad eclesial”.
Mons. López expresó su desacuerdo con la paralización de la Ley Orgánica de Calidad de la Enseñanza (LOCE) por parte del Gobierno y sostuvo que “plantea problemas en un ambiente claramente hostil a la presencia de la Religión como disciplina académica”.