Durante la audiencia general de este miércoles el Papa Juan Pablo II advirtió, al comentar el Salmo 113, “Alabanza al Dios verdadero”, que la idolatría sigue siendo una tentación para el mundo de hoy.
El Pontífice explicó que en el salmo –que se reza en la hora de Vísperas- “tras una palabra inicial dirigida al Señor para testimoniar su gloria, el pueblo elegido presenta a su Dios como el Creador omnipotente”.
“Al Dios verdadero adorado por Israel –continuó el Papa-, se contraponen enseguida ‘los ídolos de las gentes’. La idolatría es una tentación de toda la humanidad en todos los tiempos. El ídolo es una cosa inanimada, nacida de las manos del ser humano, una estatua fría, sin vida”.