La Santa Sede confirmó hoy su disposición a mediar en la crisis de Nayaf, Irak, y pidió como única condición que las partes en conflicto demuestren "verdaderamente" que están a favor de la paz.
El portavoz del Vaticano, Padre Ciro Benedittini, señaló a la prensa que "la Santa Sede está con toda evidencia dispuesta a ayudar a las partes para que hablen y dialoguen, pero con la condición de que ellas demuestren que están interesadas verdaderamente en seguir el camino pacífico para llegar a la solución de los conflictos".
El portavoz de la Santa Sede recordó que el Nuncio Apostólico en Irak sigue con atención la situación en Nayaf y las autoridades vaticanas también mantienen contactos estrechos con el Episcopado iraquí y el Patriarca Caldeo.