Un sacerdote que sirve en la Catedral Católica de Santa María, en la ciudad de Amarillo en Texas (Estados Unidos), fue rociado con gas pimienta mientras confesaba la semana pasada, según un comunicado de la parroquia.
La parroquia indicó, en un comunicado en Facebook, que “alguien que lidia con problemas de salud mental” roció al rector, el P. Tony Neusch, con la sustancia irritante mientras escuchaba confesiones.
La policía está investigando el incidente. No está claro si los oficiales han identificado a un sospechoso en este momento.