El distinguido físico mexicano Adolfo Orozco falleció el 26 de febrero, a la edad de 81 años. Reconocido por su dedicación incansable al estudio de la Sábana Santa de Turín, Orozco dejó una huella imborrable en la comunidad académica y religiosa.
El Centro Mexicano de Sindonología compartió en su página de Facebook el legado del académico e investigador Adolfo Orozco.
Licenciado en Física y Maestro en Ciencias por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Orozco fue investigador del Instituto de Geofísica de la UNAM desde 1970 y docente del Instituto de Matemáticas Aplicadas y Sistemas y del Centro de Ciencias Aplicadas y Desarrollo Tecnológico, en la misma institución.