Este 25 de enero se cumple el primer aniversario de la muerte del sacristán Diego Valencia durante el atentado yihadista perpetrado en Algeciras (España). Su familia se muestra segura de que “descansa amparado por la Virgen de la Palma”.
El Ayuntamiento de Algeciras ha convocado, de común acuerdo con la familia, una concentración de recuerdo antes de la Misa que se celebrará en la parroquia de Nuestra Señora de la Palma, donde Diego Valencia fue asesinado.
A sus 65 años, Diego Valencia llevaba 16 realizando el servicio de capellán en la iglesia de Nuestra Señora de la Palma. Estaba casado, era padre y regentaba una floristería.