Confesor del Vaticano responde: ¿Qué penitencia le daría hoy al Papa Francisco?

Por Anian Christoph Wimmer

11 de diciembre de 2023

Dic 11, 2023

Un franciscano de 91 años ha hablado sobre su tiempo como confesor del Papa Francisco y ha destacado el papel perdurable y esencial del sacramento de la reconciliación.

El hermano Otmar Egloff sirvió durante varios años como confesor principal en la Basílica de San Juan de Letrán, la célebre catedral del Obispo de Roma, según CNA Deutsch —agencia en alemán del Grupo ACI—.

Él describe cómo se le pidió que se trasladara desde su Suiza natal para servir en la basílica en 2004, hacia el final del pontificado del Papa Juan Pablo II. “Probablemente fue mi talento para los idiomas lo que fue decisivo, ya que hablo italiano, alemán y francés”, contó el sacerdote en una entrevista publicada el 7 de diciembre por el portal suizo kath.ch.

El fraile recordó que le dijeron: “¡Mañana el Papa viene a confesarse!”. Sin embargo, la experiencia no fue muy diferente de escuchar confesiones de otros católicos.

“La única diferencia fue que mi confesionario fue limpiado muy a fondo antes. Cuando llegas al confesionario por la mañana y ves a un equipo completo limpiándolo y fregándolo, eso es algo realmente diferente. Solía ir y quitar el polvo yo mismo con un paño”, sostuvo el franciscano.

“También fue especial que el Papa Francisco se confesara arrodillado en público y luego usara mi confesionario para escuchar confesiones de otros sacerdotes”, agregó Egloff.

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Manteniendo tanto el secreto de confesión como su sentido del humor, cuando el entrevistador suizo le preguntó qué penitencia le daría hoy al Papa Francisco, el franciscano respondió riendo: “Hoy, le daría al Papa una penitencia diferente. Una penitencia de la lengua. A veces, su lengua es demasiado rápida”.

Al ser consultado dónde viven los sacerdotes cuando son nombrados confesores en la Basílica de San Juan de Letrán, el hermano Otmar respondió: “Encima del techo de la iglesia están los apartamentos de los ocho frailes franciscanos que se sientan en los ocho confesionarios durante el día”.

Egloff agregó que siempre se ha asignado a franciscanos de todo el mundo para este servicio en San Juan de Letrán: “Eso siempre ha sido así y seguirá siendo así”.

Celibato y vocación

Desde su larga experiencia como confesor, el hermano Egloff destacó que el sacramento “sigue siendo importante”.

Al haber notado “una disminución de la práctica en los países de habla alemana”, expresó: “Esto es una necesidad humana y te brinda la oportunidad de un verdadero nuevo comienzo. Tu conciencia te muestra lo que estaba mal. Dios perdona”.

El Papa Francisco, quien ha alentado a los católicos a ir a la confesión, reiteró recientemente su llamado a los católicos alemanes para que recuerden “la importancia de la oración, la penitencia y la adoración”.

En la entrevista, Egloff también señaló que el celibato y el abuso no tienen nada que ver entre sí: “Es más porque se aceptaron candidatos inadecuados debido a la escasez de sacerdotes. La pedofilia es un trastorno grave y una atrocidad”.

Cuando se le preguntó si a los 20 años ya se puede saber si se puede pasar toda la vida célibe, el franciscano respondió: “Ya lo sabes. Sabes si has tenido relaciones, si anhelas una asociación o no. Tienes que lidiar con estos problemas. Probablemente esto no se discutió lo suficiente [en el pasado]. Para mí siempre fue importante ayudar a los respectivos sacerdotes y candidatos al sacerdocio y, si fuera necesario, desaconsejarlos”.

Traducido y adaptado por ACI Prensa. Publicado originalmente en CNA Deustch.